La endogamia ideológica o Redes Sociales a medida

Con el advenimiento de las redes sociales, es posible, de una forma nunca vista antes en la historia de la humanidad, contrastar opiniones y puntos de vista con otras personas a las que nunca habríamos tenido acceso en otros tiempos. Es ésta la internet del intercambio de ideas, de la reflexión, de la crítica y la autocrítica, del enriquecimiento personal y profesional a través de los demás, etc. Pero, aun siendo esto así, hay también una preocupante tendencia por parte de ciertos círculos, mayormente colectivos radicalizados en algún aspecto de su forma de pensar, a fomentar y desarrollar una endogamia ideológica.
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Me explico. Endogamia ideológica. ¿A qué me refiero?. Pues a esa querencia por parte de algunos a cerrarse sólo en círculos con ideas estrictamente similares a las propias. Sí, al igual que las Redes Sociales nos permiten llegar a muchas personas, tanto de renombre como anónimas, con las que intercambiar ideas, las Redes Sociales también nos permiten formar grupos de ideología similar más numerosos y de forma más sencilla de lo que es accesible en la vida real. De esta manera asistimos a la formación de movimientos sociales que adquieren fácil y rápidamente el peso específico suficiente para constituirse en auténticas corrientes ideológicas, e incluso hasta en partidos políticos. Algunas de estas corrientes ideológicas se radicalizan, y pasan a formar una especie de ecosistema aislado por el cual sus miembros son adoctrinados estrictamente en las ideas que promulgan, y que acaban saliendo de su grupo de influencia sólo para reaccionar en las redes sociales de forma violenta en cuanto chocan con otras formas de pensar distintas a las propias. No son los Trolls de los que hablábamos en el post “El Alter Ego en Twitter ó Cuál es nuestra verdadera personalidad”, son algo distinto. A veces también ejercen el acoso 2.0, pero pertenecen a grupos generalmente organizados, están adoctrinados, y hasta planifican acciones conjuntas según su ideología.

Pero, ¿Por qué ocurre esto?. ¿Por qué teniendo una internet abierta al mundo, que nos facilita tanto contrastar puntos de vista con personas diferentes, algunos grupos caen en esta forma de actuar?. La respuesta forma parte de la psicología humana. Suele ser una tendencia natural el tener cierta conciencia de grupo y sentido de pertenencia al mismo. Sentirse integrado en un colectivo nos refuerza personal y profesionalmente a la mayoría, pero el problema viene cuando esa integración se vuelve abductora y nos aísla de otras opciones. El auténtico problema es que algunas personas confunden esa seguridad de estar entre iguales con acabar necesitando encontrar únicamente personas con las que se está de acuerdo. Esto suele ser en una primera instancia agradable, puesto que confirma los puntos de vista propios, con obvios efectos de reafirmación personal, pero hay que reconducir esa tendencia natural y evitar que se convierta en aislamiento. Para ello debemos esforzarnos por fomentar otra tendencia también natural en el ser humano: la dialéctica y el intercambio de ideas. Para algunas personas contrastar opiniones no es tan agradable como estar de acuerdo en casi todo, pero si se supera la posible confrontación inicial, es mucho más enriquecedor, y además nos ayuda a, tal vez no siempre compartir, pero muchas veces sí comprender, las motivaciones y conclusiones ajenas.

Por ello, en las Redes Sociales, es importante que, aunque no siempre se compartan, hagan como hacen algunos con la prensa del brick&mortar (la tradicional): comprar varios periódicos de afinidades diferentes y leerlos todos, para contrastar entre ellos, y para también contrastar las ideas propias con las ajenas. Es un sano ejercicio que a veces desencadena un cambio de opinión, a veces induce un matiz en nuestras ideas, o a veces nos lleva a una reafirmación en lo que pensamos. Todas estas opciones son posibles y encomiables, siempre que se hagan desde el respeto a los que piensan de una manera diferente (si es que ellos también nos respetan a nosotros).

Y pensarán ustedes que este post toca temas similares a los del anterior que publiqué “El rechazo al diálogo o El convencimiento de creerse en posesión de la verdad”. Razón no les falta, pero en esta entrada quiero ir un paso más allá de las actitudes meramente personales que les comenté entonces, por las que ciertas personas piensan que sus ideas valen por defecto más que las de los demás, que ellos están siempre mejor informados, que están siempre en la verdad… En este post se plantea ahora la influencia de las redes sociales como elemento agregativo de personas de este tipo que además sean afines, inicialmente dispersas en el mundo real. Ahora las redes sociales se plantean como elemento vehicular para el establecimiento de la endogamia ideológica entre aquellos en los que el individualismo no es un patrón de comportamiento a añadir a su rechazo al diálogo. Ahora el plano de enfoque pasa por cómo algunas de esas personas que no respetan las opiniones de los demás, acaban encontrando un grupo con el que tienen cierta afinidad inicial, y en el que terminan aislados y adoctrinados, motivo por el cual acaban por no soportar ni tan siquiera debatir con personas de otro parecer, puesto que el mismo debate les parece un agravio tal, que a veces se ponen hasta violentos.

Les puedo decir cómo incluso he visto en Twitter perfiles evidentemente radicalizados detrás de los cuales hay personas que cuando alguien no afín se hace seguidor le mandan un mensaje amenazante del estilo a “He visto que me sigues, pero no creo que sea precisamente porque compartes mis ideas. No me gusta que me espíen”. Estas actitudes son una perversión total de la filosofía y razón de ser de redes sociales como Twitter, nacidas para la libre compartición de información e ideas, para tener la libertad de seguir a quién se le antoje a cada cual, y demuestra cómo este tipo de personas sólo están presentes en las redes sociales para expandir su radicalismo y entrar en contacto con personas afines, o para guerrear literalmente contra los individuos del polo opuesto. Pero no olviden que la intención final más usual de estos radicalismos es lograr el control total del sistema en el que van proliferando y, en ese camino, lo que empieza por una purga de los radicales de signo contrario, que muchos ven sólo como algo ajeno que incumbe únicamente a extremistas de ambos polos, acaba siendo una purga a escala general en la que se persigue hacer de la esfera propia de radicalismo la forma general de pensar del común de los mortales, bien sea por convencimiento, bien sea por temor. No olviden que a estos individuos lo que les caracterizan son sus particulares ideas, pero también que cuando consiguen una masa crítica suficientemente importante, cosa facilitada por las redes sociales, no dudan en pasar a la acción de forma concertada en pos de su ideología, lo que contrasta, y he aquí lo realmente inquietante del tema, con la habitual inacción de la mayoría silenciosa y moderada.

Como conclusión final me gustaría dejar claro que el problema obviamente no son las redes sociales, éstas son sólo una herramienta, y como tales se puede hacer de ellas un buen uso… o un mal uso. El problema son las actitudes que los seres humanos adoptamos en ellas. Por ello, aunque a veces sea desagradable ver cómo por ejemplo se insulta en Twitter a un periodista tan sólo por informar u opinar, es preferible tener la web 2.0 para al menos ser conscientes de que efectivamente hay gente así. Aprender de su existencia es paso necesario para construir colectivamente una sociedad más evolucionada, al menos en general y en lo que a la mayoría se refiere, porque creo que todos somos conscientes de que va a haber siempre ciertos elementos que, en cualquier caso, son al menos necesarios para que el resto de la sociedad recuerde cuál es el camino que no ha de seguir.

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Acerca de derblauemond

En la vorágine de la vida diaria que nos ha tocado vivir en esta sociedad del siglo XXI, apenas tenemos tiempo para pararnos a pensar, tiempo para la reflexión, tiempo para averiguar de dónde venimos y a dónde vamos. Acabamos haciendo las cosas de forma rutinaria, mecánica, como auténticos autómatas. Es por ello por lo que he creado este blog con la sana intención de, cada cierto tiempo, reservarme unos minutos de mi vida para darle vueltas a los temas que me interesan y colgarlos después en un post para compartirlos con todos vosotros. Podéis seguirme también en mi cuenta de Twitter @DerBlaueMond

Publicado el 18 julio, 2013 en Uncategorized y etiquetado en , , , , , . Guarda el enlace permanente. 1 comentario.

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